Una mano con el dedo índice extendido con una gran cantidad de lubricante personal goteando por un lado.

Foto: Clár McWeeney

Tiempo de lectura: 8 min

Cómo elegir un lubricante íntimo

Determining which lube is best for you

*Traducción: Kenny Rafael Delgado Arismendi

El lubricante personal (lubricante) se puede usar para ayudar a que los actos sexuales, como el sexo, la masturbación o el uso de juguetes sexuales, sean más placenteros. Los lubricantes trabajan para reducir la fricción entre tu piel y la persona/objeto/parte del cuerpo que está utilizando, lo que puede eliminar el roce, el dolor y el roce incómodo.

¿Por qué utilizar lubricante?

¿Por qué no usar lubricante? ¡El lubricante es genial! Usar lubricante no es nada vergonzoso, puede ser un gran aporte a tu experiencia sexual. No hay porqué sentir vergüenza de usar un lubricante personal. Muchas personas que producen grandes cantidades de fluidos vaginales aún optan por usar un lubricante para aumentar aún más su placer sexual.

Alrededor de la mitad de las mujeres posmenopáusicas tienden a notar más sequedad vaginal e incomodidad al tener relaciones sexuales (1,2). Después de la menopausia, el área genitourinaria (incluida la vagina y la vulva) puede cambiar y atrofiarse debido a la disminución de los niveles de estrógenos. Sin niveles más altos de estrógeno, estos tejidos se vuelven más delgados, menos flexibles, reciben menos flujo sanguíneo y producen menos fluidos vaginales naturales (1). El uso de un lubricante ayuda a disminuir la incomodidad del sexo al experimentar sequedad vaginal, pero no previene el problema subyacente de la atrofia del tejido vaginal.

Algunas personas pueden experimentar sequedad vaginal, lo que puede provocar molestias o dolor durante las relaciones sexuales. Cada persona es diferente. Las personas que están amamantando, que están tomando medicamentos (incluidos los antihistamínicos y antidepresivos), las sobrevivientes de cáncer de seno y las personas con síndrome de Sjogren también pueden experimentar sequedad vaginal (2). En estas situaciones, un lubricante puede ser útil.

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Lubricantes producidos por tu cuerpo

Hay muchos fluidos que produce el cuerpo que pueden actuar como lubricación, muchos de los cuales dependen de dónde te encuentres en tu ciclo:

  • La sangre menstrual se puede usar como lubricante para la masturbación o el sexo al comienzo del ciclo.

  • El fluido cervical, particularmente en el momento de la ovulación, te proporcionará un deslizamiento más resbaladizo (solo recuerda que tener relaciones sexuales heterosexuales sin protección en el momento de la ovulación tiene la mayor probabilidad de embarazo).

  • El líquido vaginal y de excitación está disponible todo el mes para ayudarte a humedecer y lubricar tu vagina. Asegúrate de dedicar suficiente tiempo a los juegos previos para permitir que tu vía de excitación produzca suficientes líquidos.

  • La saliva también se puede usar como lubricante. Usar tu propia saliva para masturbarse en realidad puede protegerte contra el desarrollo de candida vulvovaginal (3). Los investigadores piensan que esto podría deberse a algunas de las bacterias protectoras y propiedades antifúngicas que se encuentran en la saliva, además de la falta de respuesta inmune contra los propios fluidos del cuerpo. En comparación, recibir cunnilingus (sexo oral en la vulva) en realidad puede aumentar sus posibilidades de contraer una infección por cándida (3).

Cómo elegir un lubricante íntimo

El lubricante a base de agua es tú apuesta más segura para comenzar. Se puede usar para todas las necesidades sexuales: sexo penetrativo, masturbación y juegos sexuales. Los lubricantes a base de agua también son ideales para personas con piel sensible o irritación vaginal, y se pueden usar con condones y juguetes sexuales (4). También son muy fáciles de limpiar de sábanas y ropa, y no dejan manchas.

Sin embargo, los lubricantes a base de agua tienen algunas desventajas. No son buenos para jugar en el agua o sexo al ducharse, ya que simplemente se disuelven. Además, los lubricantes a base de agua tienden a ponerse pegajosos y requieren una nueva aplicación frecuente. Entonces, si planeas tener un maratón de sexo, ¿podríamos sugerirte otro tipo de lubricación?

El lubricante a base de silicona es resbaladizo, duradero y es ideal para una sesión más larga (4). Requiere que se aplique menos lubricante y necesita una nueva aplicación con menos frecuencia. Los lubricantes a base de silicona también son excelentes para el sexo en la ducha o la masturbación en la ducha, ya que no se lavan tan fácilmente. El problema es que los lubricantes a base de silicona son un poco más tediosos de lavar, ya que necesitarás agua y jabón para limpiar después. A veces, los lubricantes a base de silicona también pueden manchar las sábanas. (Advertencia: nunca derrame un frasco de lubricante con base de silicona sobre sus pisos de madera, ya que manchará y dejará su piso ligeramente resbaladizo durante meses).

Los lubricantes a base de silicona no deben usarse con juguetes sexuales a base de silicona, ya que pueden romper el caucho con el tiempo. Sin embargo, esto no significa que todos los juguetes sexuales estén prohibidos con lubricantes a base de silicona: hay muchos juguetes hechos de otros materiales, como plástico duro, vidrio y acero.

El lubricante a base de aceite también proporciona una sensación resbaladiza que dura más que el lubricante a base de agua. Estos lubricantes son ideales para la masturbación (manos o juguetes), el sexo con penetración sin protección y los juegos en el agua. Los lubricantes a base de aceite también se pueden usar para un masaje sensual.

Los lubricantes a base de aceite (o cualquier otro producto oleoso como la vaselina o el aceite mineral) no deben usarse con condones de látex, ya que pueden disolver el látex del condón y pueden hacer que los condones se rompan (4). Los diafragmas de látex y los juguetes sexuales de látex también deben mantenerse alejados de los lubricantes a base de aceite. Los condones sin látex (como los que están hechos de poli-isopreno) también son sensibles a los lubricantes personales a base de aceite, así que revisa el paquete antes de usarlo (5).

Otro inconveniente de los lubricantes a base de aceite es que pueden ser más difíciles de limpiar de las sábanas y su cuerpo.

Lubricantes para sexo anal

Se recomienda la lubricación personal para el sexo anal, ya que el canal anal no produce líquidos para ayudar a facilitar la penetración. Además, el esfínter muscular apretado en la entrada del ano ofrece mucha más resistencia que la vagina, que está llena de pliegues y tejido estirable.

Usar un lubricante personal también puede hacer que el sexo anal sea más seguro. El uso de un lubricante a base de agua disminuye las posibilidades de rotura del condón al tener relaciones sexuales anales, en contraste con los lubricantes a base de aceite o la saliva, que aumentan las posibilidades de rotura del condón durante las relaciones sexuales (6). Las posibilidades de que el condón se salga durante el sexo anal también están relacionadas con la lubricación.

La aplicación de lubricación al exterior del condón puede disminuir las posibilidades de deslizamiento, mientras que la aplicación de lubricación al interior del condón puede aumentar las posibilidades de deslizamiento (6).

Es mejor saberlo antes de comprar...

En general, evite cualquier lubricante que contenga sabores artificiales, colores, azúcares, aceites esenciales, aditivos adicionales o glicerina; nunca sabes cómo vas a reaccionar ante estos aditivos. Especialmente si es la primera vez que usa un lubricante personal, algunas de esas características adicionales como "calentamiento" u "hormigueo" pueden ser más abrumadoras de lo esperado. Además, el hecho de que un producto sea "natural" no significa necesariamente que sea mejor para usted. Consulta la lista de ingredientes, lee las reseñas de productos o ve a una tienda de juguetes sexuales y pregunta a los expertos allí.

La glicerina o glicerol es un alcohol de azúcar que a veces se usa en lubricantes. El veredicto aún no está claro si existe un vínculo entre los lubricantes que contienen glicerina/glicerol y la salud de las bacterias en tu vagina. Alguna evidencia sugiere que los lubricantes que contienen glicerina pueden aumentar las posibilidades de infecciones vaginales, mientras que otros realmente encuentran que la glicerina no hace ninguna diferencia en absoluto para la microflora de la vagina (7,8). Aún se necesita más investigación.

A veces, una gran cantidad de glicerol (y otros compuestos similares) se utilizan en lubricantes para proporcionar propiedades especiales, como sensaciones de calentamiento o resbaladizo extra (5). Un lubricante con una alta concentración de gliceroles en realidad puede tener un efecto negativo en los tejidos anales y vaginales, al causar daño y deshidratación a estos tejidos (9-11). Este daño a los tejidos no sólo es incómodo, sino que también puede aumentar el riesgo de transmisión de enfermedades de transmisión sexual (5).

Al elegir un lubricante a base de agua, intente elegir uno que refleje la acidez de una vagina sana (alrededor de un pH de 3.8 a 4.5) para evitar un mayor riesgo de vaginosis bacteriana (5). El ano tiene un nivel de acidez más neutro (pH 5,5 a 7), por lo que también intenta elegir un lubricante apropiado aquí (5).

Algunos lubricantes también pueden contener químicos espermicidas, pero pueden causar irritación en la vagina y, por lo tanto, no se recomienda su uso (5). Si estás tratando de concebir y estás usando lubricantes, asegúrate de comprar uno que sea específico para la concepción, ya que algunos lubricantes pueden disminuir la movilidad de los espermatozoides.

Sexo con dolor - una precaución

Si el sexo es doloroso para usted, aumentar la lubricación no siempre es la respuesta. Muchas enfermedades o infecciones pueden presentarse con síntomas de dolor durante las relaciones sexuales, particularmente el sexo vaginal. Esto incluye trastornos de la piel, inflamación, infecciones, cambios hormonales, traumatismos y muchas otras causas (4). Si experimentas dolor recurrente o que empeora durante las relaciones sexuales, consulta a tú proveedor de atención médica.

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