Por qué el lenguaje que utilizamos para describir el embarazo es importante

El lenguaje es más que palabras: da forma a nuestra comprensión del mundo e influye en cómo percibimos los temas delicados. Cuando hablamos del embarazo, los términos que elegimos para describir un embrión o feto en desarrollo tienen un peso significativo. Estas palabras reflejan realidades médicas, pero también influyen en los debates políticos y en las actitudes personales hacia el aborto y la salud reproductiva.

Si has leído nuestro artículo ¿Cuál es la diferencia entre un embrión, un feto y un bebé?, o estás utilizando el modo de embarazo Clue, puede que sientas curiosidad por nuestra elección deliberada de lenguaje y terminología. En este artículo, exploramos cómo se utiliza el lenguaje (y a veces se manipula) en los debates sobre el embarazo, y por qué ser consciente de nuestra elección de palabras es esencial para una comunicación clara.

Por qué las palabras que usamos son importantes

El lenguaje que utilizamos para describir el embarazo y el embrión o feto en desarrollo es importante. Desafortunadamente, el lenguaje se ha convertido en parte de la lucha por el acceso al aborto. Los medios de comunicación tienen directrices para sus periodistas sobre cómo utilizar ciertos términos cuando informan sobre el aborto, señalando que el lenguaje puede ser manipulado para obtener beneficios políticos y no para la precisión médica (1,2).

El lenguaje al que estamos expuestos puede influir en nuestras actitudes hacia el aborto. En un estudio, se realizó una encuesta sobre el desarrollo fetal a estudiantes universitarios polacos. Aproximadamente a la mitad del grupo se le asignaron preguntas al azar utilizando el término "feto" y a la otra mitad el término “niño(a)". El grupo al que se le hicieron preguntas que utilizaban la palabra “niño(a)" para describir un feto era menos propenso a apoyar el aborto cuando se les encuestó al final del estudio (3).

En 2019 se presentaron varios proyectos de ley sobre el llamado "latido fetal" a nivel estatal en EE. UU. (4). Aunque ninguna de estas leyes está en vigor a fecha de 1 de mayo de 2021 (5), esta legislación pretendía prohibir el aborto una vez que se pueda detectar la actividad cardíaca embrionaria (que se observa por primera vez en una ecografía alrededor de las 6 semanas de embarazo) (6). Es posible que muchas personas no sepan que están embarazadas tan pronto y que sus opciones estén limitadas por dicha legislación.

Algunas personas creen que el término "latido fetal" fue utilizado por los legisladores no solo para provocar una respuesta visceral sobre los «latidos», sino también en un intento de redefinir la viabilidad al sugerir que la actividad cardíaca embrionaria es un signo de viabilidad (7). En realidad, la verdadera definición de viabilidad significa que un feto puede sobrevivir fuera del útero, lo que generalmente no es posible hasta 18 semanas después de la detección de la actividad cardíaca embrionaria (alrededor de las 24 semanas de embarazo) (6), y solo entonces, con cuidados intensivos.

Conclusión

El lenguaje que utilizamos para describir el embarazo es una herramienta poderosa que puede moldear opiniones, informar políticas e influir en las creencias personales. Incluso las diferencias sutiles en la terminología pueden tener efectos profundos en la forma en que las personas perciben los problemas de salud reproductiva. Por eso, el modo Clue Embarazo utiliza una terminología médicamente rigurosa para referirse a embriones, fetos y bebés. Al elegir nuestras palabras con cuidado, podemos garantizar que los debates sobre el embarazo y el aborto sigan siendo informados y empáticos.

Si estás considerando la posibilidad de abortar y necesitas más información, lee nuestro artículo sobre qué esperar antes, durante y después de un aborto.